jueves, 29 de diciembre de 2011

AQUÍ PUEDES QUITARTE EL MAQUILLAJE.

Antes que nada, perdona si huele un poco a cerrado, hacía mucho tiempo que nadie se alojaba aquí, y menos aún con la intención de quedarse. Ábreme bien de puertas y ventanas. Que corra el aire, que entre tu luz, que pinten algo los colores, que a este azul se le suba el rojo que hoy nos vamos a poner moraos. Y hablando de ponerse, vete poniendo cómoda, que estás en tu casa. Yo, por mi parte, lo he dejado todo dispuesto para no quieras mudarte ya más. Puedes dejar tus cosas aquí, entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando. Los primeros están llenos de errores, los segundos, teñidos de ganas de no equivocarme otra vez. El espacio es tan acojedor como me permite mi honestidad. Ni muy pequeño como para sentirse cómodo, ni demasiado grande como para meter mentiras. Mis recuerdos, los dejé todos esparcidos por ahí, en cajas de zapatos gastados y cansado de merodear por vidas ajenas. No pises aún, que está fregado con lágrimas recientes, y podrías resbalar. Yo te aviso. El interruptor general de corriente está conectado a cada una de tus sonrisas. Intenta administrarlas bien y no reírte demasiado a carcajadas, no vayas a fundirlo de sopetón. No sé si te lo había comentado antes, pero la estufa la pones tú. Y hablando del tema, he intentado que la temperatura del agua siempre estuviera a tu gusto, pero si de vez en cuando notas un jarro de agua fría, eso es que se me ha ido la mano con el calentador. Sal y vuelve pasados unos minutos. Discúlpame si es la única solución, es lo que tenemos los de la vieja escuela, que a estas alturas ya no nos fabrican los recambios. Tampoco acaba de funcionarme bien la lavadora. Hay cosas del pasado que necesitan más de un lavado, es inevitable. Y hay cosas del futuro que, como es normal, se acabarán gastando de tanto lavarlas. La recomendación, ensuciarse a su ritmo y en su grado justo. Eso sí, no te preocupes por lo que pase con las sábanas, que las mias lo aguantan todo. Para acabar, te he dejado un baño de princesa, una cama de bella durmiente, un sofá de puta de lujo y algo de pollo hecho en la nevera. Para que lo disfrutes a tu gusto, eso sí, siempre que sigas reservando el derecho de admisión. Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú. Aquí no vienes a competir con nadie, sino a compartirme a mí. Y lo de dar explicaciones, déjalo para el señor Stevenson. El resto, no sé, supongo que está todo por hacer. Encontrarás que sobra algún tabique emocional, que falta alguna neurona por amueblar y que echas de menos, sobre todo al principio, alguna reforma en fachada y estructura. Dime que tienes toda la vida, y yo voy pidiendo presupuestos. Dime que intentaremos toda una vida e iré enconfrando mis nunca más. 

miércoles, 14 de diciembre de 2011

A ras del sueño

Le tengo miedo al tiempo y a los tristes funerales,pero mataría al viento si rozara a mis carnales.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Filosofia de vida.

No permitas que nadie diga que eres incapaz de hacer algo, ni si quiera yo. Si tienes un sueño, debes conservarlo. Si quieres algo, sal a buscarlo, y punto. ¿Sabes?, la gente que no logra conseguir sus sueños suele decirles a los demás que tampoco cumplirán los suyos.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Eres espéctaculo.

 y tú ni siquiera lo llegas a notar.


Aprenderé que la amistad sigue creciendo y que no importa que es lo que tengo, si no a quién tengo en la vida y que los buenos amigas son la familia que podemos elegir.


domingo, 4 de diciembre de 2011

Carpe Diem.

Porque la vida es el presente.Porque la vida es lo que tenemos ahora delante.Y parece que siempre tenemos que tener en la cabeza lo felices que fuimos en el pasado, o todo lo contrario, lo desgraciados que hemos sido. Y parece que siempre tenemos que tener en la cabeza lo felices que podríamos llegar a ser en el futuro. Ponte a pensar en ahora mismo, mientras estas leyendo esto, si eres verdaderamente feliz. Y si no es así, mueve el culo por conseguirlo.Que estoy segura que lo que tu consideras errores en tu vida, en algún momento te hicieron realmente feliz.Que cada vez que te despiertas debes tener metido en la cabeza que no es un día más, sino un día menos;que perderás deseando que llegue el fin de semana, que llegue la Nochevieja, que llegue el verano, blablabla. Que la vida no siempre tiene que ser diversión. Que ahí fuera la gente se está matando, la gente está pasando hambre, las relaciones se rompen y el mundo se destruye. Pero limitate a pensar que estas vivo. Que a nadie nos gusta estudiar ni trabajar, pero no quedan más cojones. Que todos necesitamos dósis diaria de romanticismo,pero tenerla siempre te aseguro que te haría valorarlo menos, que a nadie nos gustan los descansos de Antena3, que a nadie nos gusta estar de resaca, ni limpiar, ni oir a los que mandan,que no.Odiamos los domingos, odiamos madrugar, odiamos las verduras, odiamos los examenes, odiamos que nos pongan normas, odiamos tener que volver los sábados a casa, odiamos que no nos llamen, odiamos Telecinco, odiamos tener que pensar en política. Pero así está la cosa. Y esto es algo que hay que vivir.Nunca dijeron que la vida sería fácil, sólo prometieron que valdría la pena vivirla.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Heridas del rock and roll

¿Quién canta para ti, desde que no estoy?
¿Con quién bebes tequila, cuando no te sientes bien?
¿Quién te dice al oído, quédate?
¿Con quién compartes ese calendario, de la pared?
¿Quién te espera al salir, cuando dan las diez?
¿Quién se ríe contigo, delante de un café?
¿Con quién escucharas esa canción?
¿Quien es el encargado de amueblarte, el corazón?
¿Quién te enseña París, Venecia, nueva york?
¿Quién te arranca la ropa, dentro de ese ascensor?
¿Con quién subes la cuesta, de cada fin de mes?
¿Quién hace lo que hice yo, pero al revés?
¿Quién tiembla cuando lloras?
¿Quién te recuerda, que no estas sola?
¿Quién es tu nuevo vicio?
¿Quién te a salvado, de mis precipicios?

viernes, 2 de diciembre de 2011

Filosofía de vida.

                              
                                                                                                                    

Cuando buscamos un tesoro, no nos damos cuenta de que el camino es el propio tesoro.